El coche más caro
Esta mañana durante mi estancia de tres horas en la sala de espera del dentista (iba en calidad de acompañante) he tenido tiempo hasta para perderlo. Allí estaba una profesora de la facultad que no me ha visto.
La secretaria no hacía más que enseñar las fotos de su hija de cuatro meses a todo aquel que entraba en la consulta.
Una de veintitantos con una cara de felicidad que no te digo y juraba que ella es feliz cada vez que tiene que ir al dentista (sin comentarios).
Una de cincuenta años que asomó la cabeza hacia la sala de espera y que cuando me vio a mí sola se dio la vuelta y le dijo a la secretaria te dejo el abrigo aquí, mientras voy al baño...
Me dediqué a leer revistas. Una de fotografía, con trucos que no me sirven porque mi cámara es digital. Una de decoración con muebles de jardín y dormitorios blancos, una de música (de hace un año: viva la actualización), otra para aprender a vivir con el alzheimer, una sobre embarazos felices, una de recetas (que me la he traido), otra de moda y una de coches. Lo he visto todo. ¿Creéis que se puede uno aburrir o cansar de estar sentado en un sofá? Hoy me lo he demostrado con creces. Me iba a dar un ataque de histeria.
Este coche ha sido la sensación de esta mañana. Aqui dejo tres fotos del interior. Fijaos en las cortinillas, en la moqueta del suelo, en la pantalla, en el cuero, en los compartimentos, en los asientos...
Y en el precio: 468.736 euros.
3 comentarios
Lydia -
Te diré, simplemente busco que la foto no rebase los 20 kb dichosos, luego salen ahi de cualquier tamaño.
Besos :)
Cordelia -
ah! ¿ que haces para que te quepan esas fotos?
Marta -
Hay que ver lo aburrido que es esperar en la consulta de un dentista. Sabes el tipo de gente que lo visita, dependiendo de las revistas que hay encima de la mesilla.
Hay sitios en las que tienen el periódico, y las de interés científico, como la Muy o el Quo; en otros sitios, te encuentras con mortadelos; y en otros, con revistas rosas...
Me vuelvo a mi estudio.